La defensa de la sanidad pública y de los profesionales, tanto de los que trabajan en la sanidad pública como los que trabajan en la sanidad privada, ha centrado las actividades de la OMC en un año en el que la corporación ha seguido los parámetros del Plan Estratégico cuyo objetivo esencial ha sido y es el servicio y la mejor atención a los ciudadanos y pacientes

La actividad de la corporación, liderada por el presidente, el Dr. Serafin Romero, y todos los miembros de la Comisión Permanente, los doctores Tomas Cobo, Javier Font, José Mª Rodríguez Vicente, Rosa Arroyo y Jerónimo Fernandez Torrente, no ha cejado en su empeño en buscar consensos para defender el actual modelo de asistencia sanitaria y un pacto por los profesionales que de soluciones a la falta de planificación de recursos humanos y a la situación de precariedad y temporalidad, una coyuntura que incide en la calidad de la asistencia sanitaria.
 
Recursos humanos, problemas laborales, continuum formativo, apertura de nuevas facultades de Medicina, contrataciones de médicos sin especialidad, interpretación de la Ley de Incompatibilidades, agresiones a médicos, lucha contra las pseudociencias y pseudoterapias y acreditación de la formación han centrado gran parte de la actividad de la corporación a nivel nacional a lo que se suman las acciones internacionales a través de las organizaciones médicas mundiales de las que forma parte el CGCOM y las instituciones políticas de la Unión Europea.

Un pacto por los profesionales que solucione la actual situación de recursos humanos, la precariedad y temporalidad de los médicos, y, en especial, de Atención Primaria en España, ha sido uno de los objetivos de la profesión durante este semestre que se ha visto marcado por diferentes movilizaciones, acciones y un documento de treinta medidas urgentes destinadas a los gobiernos autonómicos. Además, un año después de la masiva concentración que protagonizaron los médicos venidos de toda España, se volvieron a manifestar frente al Ministerio de Sanidad defendiendo la dignidad de la profesión y la calidad asistencial para el paciente.

Bajo el lema “#HayMásRazones” cientos de médicos se manifestaron a las puertas del Ministerio de Sanidad convocados por la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) y el apoyo de todas las organizaciones integradas el Foro de la Profesión Médica (FPME).
 
De esta forma, el FPME decidió unánimemente apoyar las medidas reivindicativas planeadas por CESM que tienen como finalidad "conseguir la mejora de las condiciones de los profesionales y la calidad de la asistencia sanitaria en todo el conjunto del Sistema Nacional de Salud", como expuso su portavoz, Dr. Francisco Miralles, al término de la reunión, quien, a su vez, animó a la participación masiva de los profesionales médicos al objeto "de escenificar el malestar reinante en la mayoría de centros sanitarios".

Bajo el lema “Respetar al médico, cuidar de todos”, el lazo dorado como símbolo y el hashtag en redes sociales #StopAgresiones el Observatorio Nacional de Agresiones a Sanitarios de la Organización Médica Colegial (OMC), que se puso en marcha hace nueve años, presentó los datos de violencia registrados en 2018 que ascienden a 490 casos, de los que el 59% corresponden a médicas

Las agresiones registradas suponen un descenso del 4,8%, respecto a 2017, cuando se produjeron 515, lo que revela una moderada disminución de estas conductas violentas y supone un ligero cambio de tendencia. 

La OMC, que agrupa a los 52 Colegios de Médicos de toda España, puso en marcha el este Observatorio a raíz de la muerte, en 2009, de la Dra. María Eugenia Moreno, una residente de 34 años que fue asesinada por un paciente cuando se encontraba trabajando en el Centro de Salud de Moratalla (Murcia).

La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó recientemente en Brasil un nuevo informe sobre la epidemia mundial del tabaco en el que, tras destacar algunos avances en la lucha contra el tabaquismo, ha solicitado a los países implantar más medidas para ayudar a la población a dejar de fumar.

Y es que, tal y como ha evidenciado, muchas regiones todavía no han aplicado "adecuadamente" políticas que pueden salvar vidas, entre ellas las destinadas a ayudar el hábito tabáquico. Se trata de unas medidas contempladas en el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco que, tal y como ha recordado el organismo de Naciones Unidas, tienen una "eficacia demostrada" para reducir la demanda de tabaco.

Entre estas iniciativas destacan las relativas a vigilar el consumo de tabaco y las políticas de prevención, proteger a la población del humo de tabaco, ofrecer ayuda para dejar el tabaco, advertir de los peligros del tabaco, hacer cumplir las prohibiciones sobre publicidad, promoción y patrocinio del tabaco, así como aumentar los impuestos sobre el tabaco.