La Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) alerta del impacto del cambio climático en la salud de los pacientes crónicos y urge tomar “medidas transformadoras”. Así lo ha manifestado la entidad con motivo de la celebración de la 77.ª Asamblea Mundial de la Salud celebrada en Ginebra (Suiza) y del Día Mundial del Medio Ambiente.

Las enfermedades crónicas tienen causas multifactoriales y complejas, que van más allá de los aspectos puramente biológicos. La interacción entre la salud humana, animal y medioambiental influye significativamente en la prevalencia, la gravedad y el curso de estas enfermedades. Para la presidenta de la POP, Carina Escobar, “los cambios demográficos y climáticos conllevan que cada vez haya más personas con enfermedades crónicas complejas, suponiendo un reto para el sistema sanitario y social”.

El investigador Iñaki Imaz Iglesia ha asumido la dirección de la Escuela Nacional de Sanidad (ENS) del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), dependiente del Ministerio de Ciencias, Innovación y Universidades y el Ministerio de Sanidad.

El nuevo director de la Escuela Nacional de Sanidad es médico, doctor en Medicina y Cirugía por la Universidad de Zaragoza, especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública y máster en Salud Publica por la propia ENS. Iñaki Imaz sustituye en el cargo a Noa Laguna, que ejercía la dirección de la Escuela como responsable de la Subdirección de Terapia Celular y Medicina Regenerativa del ISCIII.

El Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) ha notificado, desde principios de 2024, más de 7,5 millones de casos de dengue y más de 3000 muertes relacionadas con esta enfermedad en 73 países.

En Europa continental, en 2024 se han notificado casos importados de zonas endémicas, pero hasta ahora no se han notificado casos autóctonos.

La mayoría de los casos a nivel mundial se han notificado en la región de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), siendo Brasil el país que más casos ha notificado (más de 6 millones).

Las mujeres embarazadas, los recién nacidos, los niños, los adolescentes y las personas mayores se enfrentan a graves complicaciones de salud debido al cambio climático, según una nueva colección de artículos publicados en el ‘Journal of Global Health‘, del que se hace eco la Organizaciñon Mundial de la Salud (OMS).

Los artículos documentan la evidencia científica disponible sobre los impactos en la salud de diferentes peligros climáticos en etapas clave de la vida, desde olas de calor hasta la contaminación del aire y desastres naturales como incendios forestales e inundaciones. En conjunto, muestran que los riesgos para la salud relacionados con el clima se han subestimado de manera crucial para las personas más jóvenes y mayores y durante el embarazo, con implicaciones graves y a menudo potencialmente mortales.

Tomando el calor extremo como ejemplo, los autores señalan que los nacimientos prematuros (la principal causa de muerte infantil) aumentan durante las olas de calor, mientras que las personas mayores tienen más probabilidades de sufrir ataques cardíacos o dificultad respiratoria. Se ha demostrado que cada 1°C adicional de temperatura mínima diaria por encima de 23,9°C aumenta el riesgo de mortalidad infantil hasta en un 22,4%.