El cannabis es la droga ilegal más consumida en Europa en todos los grupos de edad, según se desprende del Informe Europeo sobre Drogas 2019: Tendencias y Desarrollos, publicado ayer por la agencia de medicamentos de la UE (OEDT) en Bruselas y Lisboa. En el caso de España se señala cierta estabilización, con un 18,3 por ciento de consumidores por encima de la media europea que se sitúa en el 18 por ciento

Se estima que, en la Unión Europea, 91,2 millones de adultos (de 15 a 64 años), o el 27,4% de este grupo de edad, han probado el cannabis en algún momento de su vida. Entre los adultos jóvenes (15 a 35 años), las tasas de prevalencia durante el último año oscilan entre el 3,5% en Hungría y el 21,8% en Francia.
 
Alrededor del 1 por ciento de los adultos de la Unión Europea consume cannabis a diario o casi a diario; se estima que 91,2 millones de adultos menores de 64 años han probado el cannabis en algún momento de su vida, y de estos, unos 17,5 millones de adultos jóvenes menores de 34 años, la consumieron el último año.


Muy de lejos, la siguiente droga más consumida es la cocaína 18,1 millones; el MDMA con 13,9 millones de personas y la anfetamina con 12,4 millones de personas que admiten haberla consumido alguna vez en la vida, según el Informe Europeo sobre Drogas 2019: Tendencias y Desarrollos, publicado por la agencia de medicamentos de la UE (OEDT) en Bruselas y Lisboa.
 
El informe muestra que el consumo de drogas en el último año se concentra principalmente en los adultos jóvenes. Se estima que 19,1 millones de adultos jóvenes (de 15 a 34 años) han consumido drogas en el último año (16%) y que el número de hombres (20 %) duplica aproximadamente al de mujeres (11%).
 
"El trabajo refleja la naturaleza compleja del fenómeno de las drogas en Europa. Las drogas siguen siendo una amenaza multifacética y en constante evolución para nuestras sociedades, que afecta la vida de millones de ciudadanos en todo el mundo", señaló el comisario Europeo de Migración, Asuntos de Interior y Ciudadanía, Dimitris Avramopoulos.
 
"Necesitamos un enfoque más coordinado que aborde tanto la oferta como la demanda. Nuestros esfuerzos están dando frutos con nuestras nuevas reglas para prohibir las sustancias psicoactivas y nuestra mayor cooperación con socios internacionales. Pero también debemos considerar el papel de la digitalización en el mercado de las drogas. No tenemos tiempo que perder. Necesitamos ser coordinados a nivel nacional, europeo e internacional. Junto con nuestra agencia de drogas de la UE, continuaremos desempeñando un papel principal en este esfuerzo", indicó.
 
Cocaína y heroína
 
La cocaína es la droga estimulante ilícita más utilizada en la UE, se estima que, en la Unión Europea, 18 millones de adultos (de 15 a 64 años), o el 5,4 % de este grupo de edad, han probado cocaína en algún momento de su vida. Entre ellos hay unos 2,6 millones de adultos jóvenes de 15 a 34 años (el 2,1% de este grupo de edad) que han consumido la droga durante el último año. Seis países (Dinamarca, España, Francia, Irlanda, Países Bajos y Reino Unido) han notificado una prevalencia del consumo de cocaína en el último año entre adultos jóvenes superior al 2,5%. En el caso de España 2,8 por ciento.
 
La heroína sigue siendo el opioide ilícito más común en el mercado de las drogas en Europa y es un importante contribuyente a los costos sociales y de salud relacionados con las drogas. La pureza de la heroína sigue siendo alta y el precio al por menor relativamente bajo (habiendo caído en la última década).
 
El informe del OEDT destaca la necesidad de ampliar las medidas para abordar la hepatitis viral, especialmente en partes de Europa del Este. En este sentido, Europa ha expresado su intención de combatir la hepatitis viral como una amenaza para la salud pública en línea con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible global.
 
Según los responsables de este estudio, es fundamental proporcionar a las personas que se inyectan heroína u otras drogas un mayor acceso a la prevención, las pruebas y el tratamiento para el VHB y el VHC
para lograr este objetivo, ya que son las personas con mayor carga de enfermedades y con mayor riesgo de transmisión.
 
Nuevos opioides sintéticos
 
Por otra parte, los nuevos opioides sintéticos se observan como una preocupación creciente. La actual epidemia de opioides en los Estados Unidos y Canadá se debe en gran medida al uso de opioides sintéticos, en particular el fentanilo y sus derivados.
 
"Si bien estas sustancias representan actualmente solo una pequeña parte del mercado de drogas en Europa, son una preocupación creciente, con un uso vinculado a envenenamientos y muertes", lo cierto es que se detectaron once nuevos opioides sintéticos en Europa en 2018, generalmente en forma de polvos, tabletas y líquidos.
 
La prevalencia del consumo de opioides de alto riesgo entre adultos (de 15 a 64 años) se sitúa en el 0,4% de la población de la UE, que equivale a 1,3 millones de personas en 2017. A escala nacional, las estimaciones de prevalencia de este tipo de consumo varían entre menos de uno y más de ocho casos por cada 1.000 habitantes de
15 a 64 años.
 
Los cinco países más poblados de la Unión Europea, que representan el 62% de su población, concentran las tres cuartas partes (77 %) de su cifra estimada de consumidores de opioides de alto riesgo (Alemania, España, Francia, Italia y Reino Unido). Se estima que en España más de 68.000 están en riesgo por su consumo.
 
Drogas sintéticas
 
"La producción de drogas sintéticas en Europa parece estar 'creciendo, diversificándose y haciéndose más innovadora'", afirma el informe, que alerta de que se están utilizando nuevas sustancias para fabricar los productos químicos necesarios para producir drogas sintéticas.
 
Se estima que, en la Unión Europea, 13,7 millones de adultos (de 15 a 64 años), o el 4,1% de este grupo de edad, han probado MDMA o éxtasis en algún momento de su vida. Las cifras de consumo más reciente entre adultos jóvenes indican que 2,1 millones de personas de 15 a 34 años consumieron MDMA en el último año (el 1,7% de este grupo de edad), con estimaciones nacionales que oscilan entre el 0,2% de Portugal y Rumanía y el 7,1% de los Países Bajos. En España se estima que sus consumidores ascienden al 1,2%.
 
La prevalencia es mayor entre los jóvenes de 15 a 24 años, estimándose que un 2,3% (1,3 millones) han consumido MDMA en el último año. Hasta hace poco, en muchos países la prevalencia de la MDMA había ido decayendo desde los niveles máximos alcanzados a mediados de los 2000. En los últimos años, sin embargo, las fuentes de vigilancia muestran una situación diversa, sin tendencias claras.
 
En Europa se consumen anfetaminas y metanfetaminas, dos estimulantes estrechamente relacionados, aunque es mucho mayor el consumo de las primeras. Se estima que, en la Unión Europea, 12,4 millones de adultos (de 15 a 64 años), o el 3,7% de este grupo de edad, han probado las anfetaminas en algún momento de su vida.
 
Las cifras de consumo reciente entre adultos jóvenes (de 15 a 34 años) indican que 1,3 millones (1,0%) consumieron anfetaminas a lo largo del último año, y las estimaciones nacionales de prevalencia más recientes oscilan entre cero en Portugal y un 3,9% en los Países Bajos. En España su consumo es de los más bajos (0.9%)
 
Los datos disponibles indican que, desde principios de siglo, el consumo de anfetaminas se ha mantenido relativamente estable en la mayoría de los países europeos En Europa, se consumen otras sustancias con propiedades alucinógenas, anestésicas, disociativas o sedantes, como LSD (dietilamida del ácido lisérgico), hongos alucinógenos, ketamina y GHB (gammahidroxibutirato).

FUENTE: medicosypacientes.com