El doctor José María Pino, recibe mañana el premio de divulgación “Médicos y Pacientes”, un reconocimiento de la Organización Médica Colegial por su labor al frente de cabeceras de divulgación médica y sanitaria como Redacción Médica, Revista Médica y otras de carácter profesional que, desde hace 25 años, han resaltado el trabajo diario de los profesionales médicos y de la salud en España.

Desde este portal informativo hablamos con el premiado para conocer su opinión sobre la comunicación sanitaria o el papel de las organizaciones sanitarias en este ámbito, entre otras cuestiones.

Usted es neumólogo. ¿Qué le llevó a impulsar hace 25 años Sanitaria 2000?

Desde hacía tiempo me había interesado por la comunicación, colaborando en varias publicaciones. Fui director por ejemplo del área de Sanidad de la revista que edita Muface, y también coordinador científico de la revista Profesión Clínica Médica. Siempre he visto la comunicación como una vía no solo para transmitir los hechos, sino también como palanca de transformación. Me parece apasionante poner en valor la profesión médica y mi especialidad, la Neumología, más allá incluso de la llamada comunicación científica, también desde un punto de vista social y de la política sanitaria.

 ¿Cuál es su diagnóstico como médico sobre la comunicación sanitaria en nuestro país?

Todo es mejorable, lógicamente, y quienes trabajamos en este entorno, como también lo hacéis en Médicos y Pacientes, tenemos que convivir diariamente con el rigor y la honestidad, dos herramientas fundamentales cuando se habla de las profesiones sanitarias, y que debemos exigir igualmente al periodismo sanitario.

Ante el actual contexto de desinformación, bulos e infoxicación ¿Cuáles son las claves para que la información contrastada y veraz prevalezca sobre las fake news?

La clave creo que está en las fuentes informativas; si se le da voz al médico, al profesional de la salud, vamos a encontrar en la inmensa mayoría de los casos una información contrastada desde el punto de vista científico, y respaldada por el peso del conocimiento. La formación que tiene el médico es, además de extensa en años formativos, muy rica en matices deontológicos y en humanización, porque hablamos de personas con una gran vocación de servicio público, con el paciente y con el sistema sanitario. Por eso en Redacción Médica siempre damos todo el protagonismo a los profesionales de la salud.

¿La desinformación es un riesgo para la profesión médica y la salud de los ciudadanos?

La desinformación es un riesgo siempre, en cualquier aspecto de la sociedad en la que vivimos, pero lógicamente el sector de la salud es especialmente sensible a estas brechas de desinformación. La salud debe estar rodeada de certezas científicas en cualquier caso, y también de un tamiz que sirva para filtrar intereses que no siempre van encaminados a mejorarla.

¿Qué han supuesto las redes sociales, podcasts etc… en el entorno de la comunicación sanitaria?

La tecnología que se ha popularizado en los últimos años ha contribuido a que cualquier persona con una conexión a internet esté en disposición de ser tanto receptor, como emisor de información, con la capacidad incluso de alcanzar a una audiencia muy considerable e influir en ella. En Redacción Médica apostamos desde el principio por internet, siendo el primer medio nativo digital en el entorno de la información sanitaria. Y hemos sido testigos en 20 años de trayectoria de varios fenómenos, como el aumento de la lectura a través de los dispositivos digitales, y también de la irrupción de los llamados ‘influencers’, por ejemplo, muy ligados a la capacidad de difusión que tienen las redes sociales. A todas estas herramientas que cada vez son menos nuevas las considero un avance muy relevante en comunicación siempre que sean usadas con los criterios que antes mencionaba, rigor y honestidad.

¿Cómo valora el papel de las organizaciones sanitarias en el contexto de la información sanitaria?

Corporaciones sanitarias como el la Organización Médica Colegial tienen un papel fundamental, porque en ellas reside el conocimiento profesional, y por lo tanto la responsabilidad no solo de comunicar, sino también de velar para que quienes comunican acerca de la salud y la enfermedad lo hagan de una forma correcta. En este sentido, hace tiempo que la Organización Médica Colegial está teniendo un papel relevante, porque está sabiendo conjugar esta doble faceta.

FUENTE: www.medicosypacientes.com