La Comisión Europea ha presentado  una serie de ideas para tratar de reforzar la industria farmacéutica europea y mejorar el acceso de los pacientes a medicamentos asequibles, con la vista puesta también en identificar producciones estratégicas que puedan ser relocalizadas para evitar el desabastecimiento en periodos de crisis sanitarias como la actual provocada por el coronavirus.

Bruselas plantea así una estrategia cuyos elementos más relevantes no se desarrollarán hasta al menos el próximo año, como identificar cuáles son los puntos débiles en la cadena de producción y suministro, pero señala ya las líneas maestras para avanzar en la estrategia.

También señala otros proyectos que verán la luz a partir de 2021 como una propuesta para crear una Autoridad para la Respuesta Sanitaria de Emergencia o la revisión de las reglas comunes sobre medicamentos para tratar a menores o para pacientes de enfermedades raras, así como medidas para reducir el impacto ecológico de los medicamentos.


En todo caso, el Ejecutivo comunitario insiste en que los medicamentos han de ser "accesibles y asequibles" para los pacientes europeos y defiende la necesidad de que haya un almacenamiento estratégico europeo, así como fomentar la producción y la inversión en la industria farmacéutica europea.

Otras claves son la cooperación a escala comunitaria en materia de políticas de fijación de precios y reembolso, contar con más competencia en el sector de los medicamentos genéricos y biosimilares y fomentar la evaluación de las tecnologías sanitarias.

El vicepresidente de la Comisión Europea responsable del Modo de Vida Europeo, Margaritis Schinas, ha asegurado, con todo, que el objetivo de ganar en "autonomía estratégica" es una necesidad para reducir la dependencia de terceras potencias pero no supondrá "la puerta de atrás" para el proteccionismo.

"Estamos explorando cada centímetro de la competencia que nos conceden los Tratados porque sabemos que cuando se trata de Salud, los ciudadanos quieren a la Unión Europea presente, no de manera accesoria", ha defendido Schinas en la rueda de prensa para presentar esta estrategia, con la que Bruselas busca también ganar peso en la coordinación entre Estados miembro en un área, la sanitaria, en la que no tiene competencias.

"No queremos volver a ver los problemas que afrontamos durante las primeras semanas de pandemia y queremos evitar que se repita", ha continuado, en referencia a la descoordinación entre países socio que impedían la exportación de material esencial a otros Estados miembro o la escasez de productos clave como las mascarillas, cuya producción se encuentra fundamentalmente en China.

FUENTE: medicosypacientes.com


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