Los doctores Salvador Márquez, Gemma Ramírez y M.ª Teresa Camps colgaron su bata hace años, pero no su vocación de ser médicos. Ellos tres forman parte de los 25 médicos jubilados voluntarios de Málaga, que, durante la pandemia de Covid-19, han realizado labores de rastreo de casos y atendido a pacientes en el servicio ‘Salud Responde” por teléfono. “Ayudar en situaciones críticas va unido con ser médico, algo que nunca se deja de ser”, aseguran.
“Médicos y Pacientes” entrevista a estos tres doctores colegiados en Málaga, cuyo Colegio de Médicos organizó una bolsa de médicos jubilados voluntarios y la puso a disposición del Servicio Andaluz de Salud (SAS), y en la que han demostrado la vocación y el compromiso inquebrantable de una profesión que llevan en el ADN incluso después de jubilarse.
Dra. Gemma Ramírez: “Volver a trabajar con mis compañeros ha sido como volver a la juventud y a nuestros inicios en la carrera”
La Dra. Gemma Ramírez, especialista en Hematología, ejercía en el Hospital Clínico de Málaga y en el Quirón Salud en Málaga hasta que se jubiló de la medicina pública hace 6 años y de la privada hace unos meses, aunque colabora en el Servicio con protocolos o ensayos.
Perteneciente al Colegio de Médicos de Málaga, asegura, en esta entrevista que desde la corporación le ofrecieron la posibilidad de rastrear en la pandemia colaborando con Atención Primaria del Servicio Andaluz de Salud y adscribiéndonos a un Centro de Salud, de manera totalmente voluntaria.
“Somos muchos médicos veteranos los que trabajamos en ello. El Colegio nos ha hecho un Seguro de responsabilidad Civil. Desde la Dirección de primaria nos formaron y nos proporcionaron un teléfono y claves para el programa informático del SAS y poder realizar nuestra labor”, cuenta la Dra. Ramírez.
Una vez detectan un caso que ya ha sido valorado por su médico, lo llaman por teléfono para que les dé una lista con los nombres y teléfonos de las personas que tuvo contacto en las 48 h antes de empezar con los síntomas. “Acto seguido se identifican los contactos estrechos mediante llamadas telefónicas. Se les solicita PCR o test de antígenos y se hace el seguimiento telefónico durante los siguientes 10 días”, manifiesta.
Para la doctora lo más costoso fue aprender el manejo en el centro de salud donde estaba adscrita, pero gracias a los sanitarios de allí, médicos y enfermeras que “me formaron en todos los aspectos prácticos y muchos teóricos también lo pude hacer desde mi casa gracias a que tengo instalado el sistema informático para poder trabajar en la solicitud de los test y en el volcado de los datos. Y cuando se finaliza el seguimiento de los casos estrechos se envía al director del Centro para que traslade la información al servicio pertinente”.
“Es una labor satisfactoria y gratificante. Para todos nosotros, médicos veteranos muy curtidos en clínica, jefaturas, organización etc., compartir con nuestros colegas de primaria su trabajo y ver todo lo que hacen sin descanso ha sido como volver a la juventud y a nuestros inicios en la carrera. Y es una admiración sin límites a su labor. En el chat compartido no hay horario ni festivo para ver quien lleva un caso, como se solvente esto otro. Es un trabajo en equipo y de la manera más amable y eficiente”, explica.
Para ser rastreador en opinión de la Dra. Ramírez es una labor “más detectivesca que médica, aunque a veces cuando uno se presenta como doctora le acaben preguntando por cosas de la enfermedad”.
En Málaga, tal y como cuenta, un grupo de médicos y amigos se reunían con frecuencia en el Colegio de Médicos y fue quienes “nos encontramos en condiciones de hacerlo colaboramos primero en labores de call center y después en rastreadores”. Para la doctora “a veces con una simple respuesta de las preguntas de los telefoneados ayudamos”.
Dr. Salvador Márquez: “Somos médicos hasta el fin de nuestros días, aunque no estemos sujetos a horarios o salarios”
El Dr. Salvador Márquezes especialista en Medicina del Trabajo. Ha desarrollado su actividad laboral en los servicios médicos de distintas empresas y organismos. Los últimos veinte años, hasta su jubilación, fue responsable de los servicios médicos de ENDESA en Málaga. “Me prejubilé en 2018, aunque la jubilación me llegó al cumplir los 65 años en 2020”, cuenta para “Medicosypacientes.”
Desde el inicio de la pandemia, el grupo de médicos veteranos del Colegio de Málaga, al que pertenece, se pusieron a disposición, tanto del Colegio como de la Sanidad Pública “para colaborar en lo que pudiera ser necesario, de forma que, en un principio, algunos compañeros ayudaron mediante tele consultas a través de la red Salud Responde del Servicio Andaluz de Salud”, señala.
Después se les planteó la posibilidad de llevar a cabo labores de rastreo, “muchos de nosotros decidimos implicarnos en esta actividad. En total somos unos 25 los Médicos jubilados de Málaga los que lo hacemos desde agosto”, asegura.
En todo este tiempo han tenido dos mecánicas de trabajo. En un principio era fundamentalmente, en coordinación con el Centro de Salud al que cada uno fue asignado y desde hace unas semanas, se puso en marcha en la Comunidad Autónoma Andaluza la aplicación APEX de seguimiento de casos Covid.
Cuando el laboratorio detecta una PDIA positiva, automáticamente el caso aparece en la aplicación y el rastreador es quien se encarga de contactar con el enfermo, hacerle le entrevista y solicitarle la información de los contactos estrechos que haya tenido en los días anteriores a su prueba positiva.
“Una vez recogida esta información, contactamos con esas personas y, si hay indicación se les solicita PDIA (PCR o Test de Antígenos). A partir de ese momento, nos encargamos del seguimiento telefónico del caso y de los contactos, dando las indicaciones de aislamiento, medidas a seguir, etc.”, señala.
Tener manejo informático, además de un conocimiento de las indicaciones de aislamiento, medidas a tomar, son algunos de los requerimientos que se necesitan para ser rastreador.
Actualmente, están rastreando militares no sanitarios, “pero en mi opinión, es una labor mucho más eficaz si la hacemos profesionales de la sanidad, ya que la posibilidad de aconsejar y discernir la evolución de los enfermos en las llamadas de seguimiento es mucho mayor en nuestro caso que si lo hacen no sanitarios. Por supuesto agradeciendo siempre la ayuda y colaboración que están prestando estos otros rastreadores”.
Para el Dr. Salvador Márquez “el Médico jubilado es igual de médico antes y después de jubilarse. Somos médicos hasta el fin de nuestros días, aunque no estemos sujetos a horarios o salarios”. Hay compañeros que tras la jubilación se desligan por completo de la profesión y otros (yo creo que la mayoría) que seguimos activos, bien organizándonos a través de los Colegios de Médicos, bien en Sociedades Científicas o cualquier otro medio de seguir en contacto y aportando a la profesión.
“En una situación tan excepcional como la que estamos viviendo, creo que nuestra formación y experiencia debe ser aprovechada por la sociedad en la forma que se estime más útil. Muchos de nosotros nos encontramos en perfectas condiciones físicas e intelectuales que nos permiten poder aportar todo ese bagaje en beneficio de los enfermos y de la sociedad en general”, señala.
Dra. M.ª Teresa Camps: “Los médicos jubilados teníamos la necesidad de participar de alguna forma para ayudar a nuestros compañeros”
Finalmente, la Dra. M.ª Teresa Camps es especialista en Medicina Interna y ha dedicado la mayor parte de su vida a las enfermedades auto inmunes ejerciendo durante 40 años en el Hospital Regional de Málaga. “Entré con 23 años para hacer la residencia y salí a los 63 cuando me prejubilé en el año 2018”, indica.
En su caso ha participado en el servicio ‘Salud Responde’ del SAS. “Decidí colaborar en este servicio por cómo iba avanzando la pandemia y, como la gran mayoría de los médicos jubilados, teníamos la necesidad de participar de alguna forma para ayudar a nuestros compañeros”, cuenta.
Tal y como explica, este grupo de médicos se puso en contacto con el Colegio de Médico de Málaga y “empezamos a hacer una lista de voluntarios creo que se reunieron unos 401 médicos jubilados. Un día recibí la llamada del Colegio para participar en el servicio de ‘Salud Responde”.
Este servicio nace como consecuencia de la pandemia y debido a la saturación de los Centros de Salud que no podía prestar sus servicios, ni atender a sus llamadas telefónicas, ni a dar citas… Se creo esta aplicación para que, mediante videollamada, los médicos voluntarios atendieran a los pacientes covid, a los no covid, a los que tenían sospecha por contacto o síntomas.
“Les solemos tranquilizar, le decimos las cosas que deben de hacer para no contagiar a más gente, que piensen cuál ha sido su contacto estrecho para también darle las normas de lo que debe hacer ese contacto estrecho, les damos consejo y en cierta forma también hacemos de rastreadores, un poco, para que todos los que pueden ser positivos evitar que vayan a trabajar, al colegio y que enseguida vayan a hacerse la prueba y no seguir contagiando”, explica.
No acceden a la aplicación de rastreo, pero si pueden contactar con el médico de familia para avisarle de que hay un usuario que quiere verle, aconsejarle si les parece grave que vaya a urgencias o que medicamentos tomar. “La gran mayoría de ellos tienen mucha angustia primero por su evolución y después por la ansiedad y el miedo de contagiar a su familia”, subraya.
“La gran labor que hacemos es que el paciente se queda tranquilo porque es un médico el que le está oyendo y aconsejando en base a su formación y conocimiento actualizado”, matiza.
El fin último de este servicio era ayudar a los médicos de familia “ante la avalancha de pacientes que se le ha venido encima que ha sido incapaz con los medios que tienen de poder solucionar todo en su momento y yo creo que este servicio -explica la Dra. Camps- ha sido un respiro y un alivio”.
En su opinión, el papel del médico jubilado en España “es muy pobre”. “Es una pena que no exista aquí la figura que existe en otros países, que es la figura del experto dado que nuestra carrera culmina justo cuando tenemos la mayor experiencia en muchos temas de Medicina, yo por ejemplo en enfermedades autoinmunes. Es cuando el médico tiene mayor experiencia cuando tiene que decir adiós a su a su profesión de médico. Yo he luchado por que exista en el Hospital Regional de Málaga la figura del experto, pero no he sido escuchada”, manifiesta.
En su opinión, son muchos los jubilados que han querido ayudar en la pandemia. “Ayudar es la primera palabra que sale en la profesión médica. El compromiso y la necesidad de ayudar en los momentos críticos”, dice la médica jubilada quien añade que son más de 400 los médicos que en Málaga se han ofrecido para rastreador y para lo que fuera necesario siempre que no exigiera una presencia física “dado que al estar jubilado ya se sabe que tenemos una edad de riesgo”.
Para la Dra. Camps la labor de los médicos jubilados ha sido muy buena y necesaria. “Lo hemos hecho desde el cariño y desde el punto de vista de nuestro saber médico”, expone. “Hemos intentado también hacer campañas desde Colegio de Médicos para dar apoyo y ánimo a nuestros compañeros que están en el frente y en primera línea”, concluye.
El CGCOM cuenta con un registro de médicos jubilados voluntarios formado por más de 2.000 profesionales
El Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) cuenta con un registro de médicos jubilados voluntarios formado por más de 2.000 profesionales que puso a disposición para colaborar con las administraciones en la lucha contra la pandemia por la Covid-19.
Además, desde el 6 de febrero, los profesionales sanitarios jubilados (personal médico, de enfermería y emérito) pueden reincorporarse al servicio activo del sector público y tienen derecho a percibir al mismo tiempo el salario y el importe de la pensión de jubilación que estuvieran cobrando, incluidos los complementos a mínimos si los cobraran.
Así lo recogió el Boletín Oficial del Estado (BOE) que publicaba la medida incluida en el Real Decreto de medidas extraordinarias en materia de Seguridad Social aprobado el 4 de febrero por el Consejo de Ministros. Según el texto publicado, la reincorporación deberá realizarse "a través del nombramiento estatutario correspondiente" a través de la autoridad competente de la Comunidad Autónoma o por el Ministerio de Defensa en la Red Hospitalaria de la Defensa.
FUENTE: medicosypacientes.com