Los representantes de la Sección Nacional de Atención Primaria Urbana del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) reunidos en una asamblea presencial y telemática, ante la preocupación del futuro de los médicos de Atención Primaria en España, han elaborado una serie de propuestas de líneas de trabajo para reconducir esta situación.
La Dra. María del Mar Martínez Lao, representante nacional de la sección de Atención Primaria Urbana del CGCOM, fue quien presidió la asamblea en la que expusieron lo siguiente:
La atención primaria (AP) es el eje del sistema sanitario. Es la puerta de entrada y es un derecho consolidado desde su reconocimiento como tal, ya en la conferencia de Alma Ata. El ejercicio de la medicina en el primer nivel asistencial es una de las prácticas médicas más apasionantes y atractivas que se pueden desarrollar dentro de todo el ejercicio profesional de la práctica médica. La AP es, además, donde los médicos nos acercamos e interactuamos directamente con los enfermos y con las circunstancias vitales de nuestros pacientes. Por tanto, debe ser accesible a todos los miembros de una comunidad, ofreciendo siempre, el mejor servicio sanitario disponible.
Sin embargo, debido a diferentes factores, la situación actual de los médicos de atención primaria se enfrenta a varios retos que pueden amenazar la esencia y la función que ejercemos, y, por tanto, a nuestra incalculable utilidad en la prevención, en el diagnóstico, en el tratamiento y en el seguimiento de innumerables condiciones de salud que son valorados en este crucial nivel asistencial.
Las amenazas a las cuales nos enfrentamos día a día tienen diferentes orígenes, pero todas tienen una consecuencia común: afecta a la salud de toda la comunidad. Las causas son bien conocidas: Infrafinanciación, sobrecarga asistencial, exceso de burocracia, falta de reconocimiento, escasa incentivación, desgaste profesional, envejecimiento de la plantilla…sin ir más lejos, la sobrecarga asistencial de años de evolución agravada en los dos últimos años por la pandemia, y que ha repercutido en la posibilidad del seguimiento de la patología crónica de los pacientes, con la dedicación que requieren, ha conllevado un exceso de muertes que está siendo estudiado, la Sociedad Española de cardiología en su última publicación señala “En el 2020, la mortalidad cardiovascular subió un 2,8% respecto a 2019, cuando fallecieron un total de 116.215 personas por esta causa, La buena noticia es que tenemos en nuestra mano un gran arma para luchar contra estas enfermedades: la prevención. Y es que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 80% de los infartos de miocardio y de los accidentes cerebrovasculares PREMATUROS son prevenibles”.
Desde la asamblea de representantes de la sección nacional de Atención Primaria Urbana del CGCOM nos preocupa el futuro de los médicos de atención primaria en España. Es por esto que hemos elaborado una serie de propuestas líneas de trabajo para reconducir esta situación.
Gestión compartida de la demanda
Proponemos la capacitación y la gestión adecuada de todos los recursos humanos participantes en los equipos de atención primaria. La labor del médico dentro de los equipos de atención primaria está íntimamente sustentada en el trabajo de otros miembros del equipo asistencial. Desde este punto de vista, se considera Indispensable la labor de la correcta clasificación de la demanda asistencial desde un primer contacto con el administrativo hasta la atención clínica definitiva, adecuada a la necesidad de cada usuario o paciente. La labor de clasificación de las múltiples demandas en la entrada al centro de salud, hacia un proceso puramente administrativo o de asistencia clínica urgente o demorable, puede ser realizada por el profesional más adecuado, así como, establecer la necesidad de atención final por el médico de atención primaria en un plazo óptimo.
Destacamos por otra parte, la labor indispensable y necesaria del triage de enfermería y su actuación clínica en determinados motivos de consulta, sin necesidad de la participación del médico, en muchas de las situaciones que actualmente son llevadas por el médico sobrecargado asistencialmente.
Una adecuada gestión compartida la demanda es la base para paliar dicha sobrecarga asistencial que padecemos de forma sistemática los médicos de atención primaria: “Que ningún médico haga lo que pueda hacer enfermería o administración”
Desburocratización de procesos
En la actualidad, el médico de atención primaria se ve obligado a la realización de infinitos trámites burocráticos que no ofrecen ningún acto de valor clínico: la petición de una ambulancia programada para traslado de un paciente de su domicilio al hospital, la emisión de un justificante de asistencia, la cumplimentación de formularios y datos administrativos en la gestión de las incapacidades temporales, la corrección puramente administrativa de las prescripciones en la receta electrónica. En todos estos procesos, la participación de otros profesionales principalmente dedicados a la gestión administrativa es fundamental y es otro factor determinante en disminuir la sobrecarga asistencial actual, en favor de una mejor calidad asistencial hacia la población.
Para ello, es necesario la implicación y el compromiso en diferentes niveles. En la gestión de la incapacidad temporal deben estar implicados todos los médicos de los diferentes niveles asistenciales, acorde con el RD 625/2014, que capacita la implicación de los especialistas hospitalarios, los médicos de las mutuas incluso los médicos del trabajo. En la gestión puramente administrativa, es decir, la elaboración de los datos concernientes a los nombres de las empresas y los códigos de ocupación es una tarea perfectamente asumible por equipos administrativos, ya que son datos no necesarios para la emisión de la baja en sí.
Adecuar y unificar la cartera de servicios de atención primaria a las necesidades poblacionales
La Cartera de Servicios varía en las diferentes comunidades autónomas. La población muchas veces desconoce la utilidad real de los programas y necesidades de atención sanitaria. La oferta de un programa común y el conocimiento y el buen uso de la población es fundamental. Este buen uso de los recursos sanitarios en atención primaria incide directamente en la salud y en el bienestar de la población, así como en la satisfacción y reconocimiento de los médicos y los equipos de atención primaria. La participación en programas de detección precoz de patologías, los cuidados de los pacientes crónicos, la salud de la adolescente, la salud de los niños, la salud de la mujer, la salud de los grupos de riesgo...etc., debe estar integrada en una cartera de servicios que conozca bien la población.
Plan nacional y ley de blindaje del presupuesto de la Atención Primaria
La recomendación de los organismos internacionales y de la OMS es que se aplique un 25% del presupuesto sanitario o un 1% del producto interior bruto en la atención primaria. La realidad actual es que en el mejor de los casos no llega a un 16%. La inversión en estructuras y en tecnología tiene repercusión directa en la mejora de la salud y en la reducción del gasto sanitario global. Somos conscientes que todos los programas de atención a la infancia, los programas de vacunación y especialmente el programa de detección precoz del cáncer de mamá, tiene una repercusión directa en dicho gasto, así como, el trabajo continuo en la promoción de hábitos de vida saludables, como es la prevención del tabaquismo, de la diabetes y de las enfermedades cardiovasculares (1).
Puerta de entrada del sistema sanitario
Los equipos de atención primaria y especialmente el médico de atención primaria gestiona más del 90% de los procesos de salud. El correcto uso y la garantía de qué el acceso a otros niveles asistenciales sea el correcto y el óptimo, depende mucho de la disponibilidad de una asistencia clínica de calidad. Toda acción encaminada a bajar la sobrecarga asistencial, así como el establecimiento de protocolos facilita y optimizar el uso de los diferentes recursos y niveles asistenciales, pero, con una máxima muy importante que no hay que olvidar: ningún protocolo está por encima de la seguridad del paciente. Esto implica tiempo para una asistencia correcta y segura a nuestros pacientes, y también nos involucra en la denuncia a la Alta Inspección y a la deontología el incumplimiento de este principio.
Acceso unificado a las pruebas complementarias disponibles desde atención primaria
Este concepto viene íntimamente ligado a la cartera de servicios que entendemos debe ser similar para todas las comunidades en España, y acorde a la de los países de nuestro entorno. La posibilidad de solicitar una prueba de imagen definitiva desde el primer nivel asistencial facilita el acceso a otros niveles o puede finalizar el acto sanitario en el primer nivel asistencial. Influye directamente en la descarga de las listas de espera, ahorro en el gasto sanitario de las CCAA, y en el nivel de salud de la población.
Optimización de las nuevas tecnologías
La utilización de nuevos medios tecnológicos y telemáticos permite optimizar la comunicación entre los diferentes niveles asistenciales y entre los profesionales de un equipo de atención primaria. El uso de dermatoscopias, de pruebas diagnósticas de imagen como la ecografía en atención primaria o la tecnología 5 G y el uso de drones en las emergencias de atención primaria pueden condicionar muy favorablemente la atención sanitaria en el primer nivel, pero nunca tienen que ser el óbice para retrasar una derivación a un médico hospitalario, si la patología así lo requiere.
El papel de otros profesionales en los equipos de atención primaria, farmacéuticos de atención primaria, psicólogos, fisioterapeutas, nutricionistas de atención primaria. Los equipos de gestión.
Cada vez es más patente la necesidad de la participación de diferentes profesionales en la asistencia sanitaria global de la población. Las necesidades poblacionales adaptadas a cada comunidad precisan de la aportación de otros profesionales que soportan el acto médico. La gestión de la prescripción en la que participan activamente los farmacéuticos de atención primaria, con los nuevos sistemas de receta electrónica, la promoción de la salud en poblaciones vulnerables, con la participación cada vez más necesaria de psicólogos, de educadores de la salud, la recuperación que la funcionalidad y el papel indispensable que realizan los rehabilitadores y fisioterapeutas, sin que los pacientes necesariamente tengan que acudir a los hospitales, ha quedado patente en los últimos años.
La profesionalización indispensable de los gestores sanitarios que se enfrentan a retos que en algunos casos nunca hubieran imaginado, requiere una formación continua y un trabajo al lado de los médicos de atención primaria. Es importante QUE ESTÉN al lado, no enfrente.
Potenciar la formación de médicos de atención primaria
En las últimas convocatorias de la formación médica especializada ha quedado patente la falta de interés por la especialidad en muchos médicos en formación. Esta carencia compromete la continuidad. Es por ello que debemos trabajar en la motivación y el estímulo de la formación de nuevos médicos de familia. Es preciso establecer estrategias y programas ya desde la propia facultad y los estudios pregrado y adaptar el ejercicio de la medicina en el primer nivel asistencial, de forma que los jóvenes puedan percibir como una alternativa altamente satisfactoria para su desarrollo profesional y personal. Esto implica a todos los profesionales que trabajamos en la atención primaria, implica a los políticos que elaboran las leyes, implica a la propia población.
Incidir en la formación a la población sobre el buen uso de la sanidad, con especial énfasis en la atención primaria
Entendemos que la participación de la población, a quién va dirigida la prestación de salud debe conocer y saber valorar lo que significa disponer de una atención primaria excelente. Asimismo, debe conocer las oportunidades y las amenazas. En esta labor informativa debemos participar todos los implicados especialmente las Autoridades Sanitarias.
FUENTE: medicosypacientes.com