El Dr. Tomás Cobo, presidente del Consejo General de Médicos (CGCOM), ha participado esta mañana en la mesa redonda “La visión de los profesionales” de la jornada “Salud en todas las políticas” organizada por los Colegio de Médicos y Veterinarios de Valladolid junto a Luis Alberto Calvo Sáez, presidente del Consejo General de colegios de Veterinarios y a Eduardo Rojas Briales, decano y presidente del Colegio Oficial de Ingenieros de Montes.

El Dr. Tomás Cobo ha destacado la importancia de acciones como este acto, que sirven para “promocionar e impulsar y divulgar este ámbito de conocimiento en el que tenemos que estar todos”.

“Desde el Consejo General de Médicos, desde la profesión médica, vigilamos el ventrículo izquierdo, es decir, el código deontológico, que exige a los médicos un comportamiento por encima del Código Penal y del Código Civil”, ha afirmado.

Asimismo, el Dr. Cobo ha destacado que “sin duda, ese comportamiento ejemplarizante tiene que ir también en esta línea: no negar en el año 2022 que el cambio climático es un problema, y es un problema grave”. En esta misma línea, el presidente del CGCOM ha resaltado “la importancia de la multidisciplinariedad a la hora de abordar este problema de salud pública”.

El niño con tuberculosis (TB) requiere un tratamiento que es largo, tedioso y supone un reto para los padres y cuidadores(1). La falta de adherencia al mismo es una de las principales causas de fracaso terapéutico, que conlleva mayor morbilidad, potencial aparición de resistencias y perpetuación del riesgo de contagio en la comunidad.

La ausencia de presentaciones farmacéuticas líquidas, el gran número de comprimidos, la escasa palatabilidad, la toxicidad y la necesidad de ayuno contribuyen a dificultar dicha adherencia. En los últimos años, la OMS y UNICEF han impulsado el desarrollo de comprimidos dispersables de dosis fija (CDFp) que incluyen combinaciones de los fármacos antiTB orales de primera línea, de características organolépticas agradables para los niños(2). Algunos de estos CDFp ya están disponibles en el mercado, han sido precalificados por la OMS y forman parte de la 6ª Edición de la WHO Essential Medicines List for Children(3).

Más de 100 países en el mundo están utilizando ya estos CDFp con éxito. A pesar de ello, los CDFp todavía no han sido evaluados por la Agencia Europea del Medicamento y no están disponibles en España. En nuestro país, y en la mayoría de países europeos, las presentaciones farmacéuticas disponibles de antiTB de primera línea son inapropiadas para la edad pediátrica(4). De hecho, solo disponemos de una suspensión oral de rifampicina.

El Comité de Evaluación de Riesgos de Farmacovigilancia (PRAC, por sus siglas en inglés) de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) ha concluido que "no hay pruebas suficientes" para establecer una relación causal entre las vacunas contra la COVID-19 de Pfizer y Moderna y los casos de ausencia de menstruación (amenorrea).

La ausencia de menstruación puede definirse como la ausencia de sangrado durante un periodo de 90 días o más, según explica la EMA a través de un comunicado.
 
El PRAC ha evaluado todos los datos disponibles, incluidos los resultados de la literatura científica y los casos de amenorrea notificados a la base de datos europea de efectos adversos EudraVigilance tras la administración de las vacunas de Moderna o Pfizer.

El secretario general del Consejo General de Médicos (CGCOM), Dr. José María Rodríguez Vicente ha participado en la mesa “Agresiones a los profesionales sanitarios ¿Aumento o disminución en tiempos de pandemia? Soluciones” dentro del V Congreso de Derecho Sanitario de la Comunidad Valenciana en la resaltó el trabajo del Consejo General de Médicos para proporcionar formación, prevención y ayuda jurídica frente a las agresiones.

El Dr. Rodríguez Vicente participó en esta mesa junto al Interlocutor Policial Sanitario, Manuel Yanguas y el secretario general del Consejo General de Enfermería, Diego Ayuso bajo la moderación del Dr. Gaspar Garrote, coordinador del Observatorio de Agresiones del CGCOM. Todos ellos demandaron que se lleve a cabo un registro único de agresiones contra los médicos como un "el primer paso" para endurecer la ley frente a estos ataques que, según un estudio de la Policía Nacional, sumaron más de 10.000 durante 2021.

Respecto al tema central de la mesa, el Dr. Rodríguez Vicente expuso los datos de agresiones a médicos presentados el pasado mes de marzo por la corporación en los que se mostraba un significativo aumento (+39%) de las agresiones durante el segundo año de pandemia. “Nos preocupan enormemente estas cifras porque si no cuidamos a los cuidadores nuestro Sistema Nacional de Salud se debilitará aún más y perderá parte de su más que reconocida eficiencia”.