En menos de quince días la misma doctora que tuvo que denunciar al padre de una paciente por amenazarla e insultarla durante su jornada laboral, se ha visto obligada a volver a la policía para interponer una nueva denuncia. En esta ocasión, la pareja del acusado ha publicado en un grupo de Facebook una hoja de reclamaciones hacia la colegiada, en la que aparece el nombre completo de la facultativa e información sobre su centro de trabajo. La mujer, que ha realizado la publicación en un grupo de Facebook, es pareja del hombre que la semana pasada amenazó e insultó a la misma doctora y fue condenado por el juzgado a pagar una multa de 400 euros

Han pasado menos de quince días y, la misma doctora que tuvo que denunciar al padre de una paciente por amenazarla e insultarla durante su jornada laboral, se ha visto obligada a volver a la policía para interponer una nueva denuncia. En esta ocasión, la pareja del acusado ha publicado en un grupo de Facebook una hoja de reclamaciones hacia la colegiada, en la que aparece el nombre completo de la facultativa e información sobre su centro de trabajo. La doctora ha presentado una denuncia en la Comisaría de Policía al considerar que la publicación falsea la realidad, atenta contra su dignidad y tiene como único fin el fomentar el odio hacia su persona. Igualmente ha denunciado a la página de Facebook, por dar divulgación de los hechos denunciados y permitir el fomento de odio contra el personal sanitario de la Ciudad, así como a los que han publicado comentarios difamatorios en dicha página.


Según relata la colegiada, la noche de ayer regresó a su consulta la hija del denunciado, acompañada por su madre. Tras percatarse de que la paciente se trataba de una familiar directa de su anterior agresor, la doctora pidió a una de sus compañeras que atendiera la consulta, ya que la relación médico-paciente podría verse afectada si no lo hacía. La paciente fue atendida por otra facultativa del centro y tratada con total normalidad por la misma. Sin embargo, antes de salir de Urgencias, la paciente decidió poner una reclamación, al considerar que ser atendida por otra profesional era inaceptable.

Esa misma hoja de reclamaciones fue la que la madre de la paciente subió a un grupo de Facebook ayer por la tarde. En la publicación, la mujer muestra en varias ocasiones el nombre y apellidos de la doctora, su lugar de trabajo y la acusa de “obligar” a su hija a ir a otra consulta “porque le dio la gana y no tenía ganas de trabajar”.  Tras ello, los comentarios de odio hacia la colegiada y hacia la falta de profesionalidad del servicio de Urgencias no se han hecho esperar, incitando al odio contra la doctora y contra otros profesionales sanitarios.

La colegiada, a pesar de haberse visto respaldada por sus compañeros y por la Policía, dice sentirse angustiada, intimidada y frustrada por los hechos que está viviendo en los últimos días. El Colegio de Médicos, así como el Sindicato Médico, desean mostrar su solidaridad con la compañera agredida y han puesto a disposición de la profesional sus servicios jurídicos para que pueda continuar con el proceso y llegar hasta las últimas consecuencias penales. Ambas organizaciones tachan de inaceptables los hechos ocurridos y recuerdan que las agresiones verbales y la incitación al odio son sucesos muy graves que atentan contra la dignidad profesional de todo el colectivo médico, especialmente cuando se usan redes sociales como medio para magnificar el linchamiento moral, buscando el desprestigio personal y profesional, en un espacio de acceso público como la página denunciada que cuenta con más de 30.000 seguidores.

Los médicos de Ceuta ven peligrar su seguridad

El suceso de ayer no es un caso aislado. En los últimos días, el Colegio de Médicos ha registrado tres denuncias más de facultativos que han visto amenazada su integridad física en el desarrollo de su jornada laboral, una de ellas de la misma médica que ha vivido el último suceso relatado, y está personado como acusación popular en defensa del equipo del 061 agredido el pasado mes de julio.

Las amenazas de muerte, los insultos y las agresiones se están haciendo más habituales en las consultas, provocando que los profesionales sanitarios comiencen a sentir inseguridad en sus centros de trabajo.

El Colegio de Médicos de Ceuta reitera su condena a cualquier acto de violencia sanitaria y expresa su indignación ante estos nuevos casos de agresiones a profesionales de la salud y recuerda que el Código Penal considera delito de atentado contra la autoridad las agresiones ejecutadas contra los funcionarios públicos en el ámbito  de la sanidad. Desde la institución se quiere recordar que todos sus miembros tienen a su disposición un seguro de protección de asistencia jurídica para estos graves incidentes. Además, alienta a los facultativos a que ante cualquier acto en el que se vean intimidados, amenazados, maltratados o agredidos, denuncien para poder poner fin a este tipo de acciones que cada vez son más frecuentes.

FUENTE: medicosypacientes.com