En una carta abierta difundida ayer con motivo de la conmemoración del 30º aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño por parte de la organización, su directora ejecutiva, Henrietta Fore, reconoció que los niños de hoy “se enfrentan a nuevas dificultades y cambios a nivel mundial que eran inimaginables para sus padres”

La responsable de Unicef subrayó que uno de cada cuatro niños vive en países afectados por desastres o conflictos violentos y que el número de países en situación de conflicto en la actualidad es el más alto registrado desde la aprobación de la Convención sobre los Derechos del Niño en 1989.

Asimismo, lamentó que los niños tengan que vivir una “crisis mundial del clima que tiene el potencial de socavar la mayoría de los avances logrados en materia de supervivencia y desarrollo infantil, en los últimos 30 años y está afectando de manera desproporcionada a los niños más pobres y vulnerables”.


La misiva también refleja su preocupación por el hecho de que muchos niños van a crecer como nativos de un entorno digital “saturado de información falsa a la que se accede muy fácilmente en internet”.

Una información falsa que, a su juicio, “ya está exponiendo a los niños a la captación con fines sexuales, el abuso y otras formas de explotación; está sesgando el debate democrático”.

“En algunas comunidades está llegando incluso a provocar el resurgimiento de enfermedades mortales debido a la desconfianza de la gente en las vacunas, instigada por la información errónea de internet”, abundó.

Fore instó, en este sentido, a generar “resiliencia contra la avalancha diaria de falsedad que hay en la red” y a formar a los jóvenes para que puedan convertirse en ciudadanos “activos y comprometidos”.

Por otra parte, la directora ejecutiva de Unicef también expresó su preocupación por el aumento de enfermedades mentales entre adolescentes tras la aprobación de la Convención sobre los Derechos del Niño.

Tras señalar que la depresión es una de las “causas principales” de discapacidad entre los jóvenes, invitó a “dar prioridad” a la difusión, la prevención, el tratamiento y la rehabilitación de niños y jóvenes que sufren problemas de salud mental, así como a luchar contra los “estigmas y tabúes” que las rodean.

“La infancia ha cambiado, y nosotros tenemos que cambiar nuestros enfoques para adaptarnos a esos cambios”, subrayó Fore, para quien también constituyen un “desafío” las migraciones masivas, la apatridia, las habilidades futuras para los trabajos del futuro, los derechos sobre los datos y la privacidad en la red así como la información falsa en internet.

Finalmente, invitó a los líderes mundiales a que sigan el “ejemplo” de los movimientos juveniles que buscan “soluciones para responder a los desafíos a los que se enfrentan”.

FUENTE: medicosypacientes.com