La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) ha reiterado que las sustancias que se inhalan a través del cigarrillo electrónico y los dispositivos de vapeo son "tóxicas y nocivas" para la salud

A 27 de agosto, las autoridades sanitarias de Estados Unidos han contabilizado 215 posibles casos en 25 estados diferentes de una enfermedad respiratoria desconocida de origen no infeccioso. Todos los afectados son adultos jóvenes entre 17 y 38 años, y el denominador común es el consumo de cigarrillos electrónicos. Además, también se investiga una muerte posiblemente vinculada, según los Centros de Control de las Enfermedades y Prevencion de EEUU (CDC, por sus siglas en inglés) y la Administración de Alimentos y Medicamentos de EEUU (FDA, por sus siglas en inglés).

"Por el momento, no es posible saber si se trata de una misma enfermedad o de enfermedades distintas con síntomas similares, pero lo cierto es que ya ha provocado un muerto y que el tratamiento no es sencillo. En muchos casos, ha sido necesario intubar a los afectados", ha comentado el presidente de los neumólogos españoles, Carlos A. Jiménez-Ruiz.


Desde 2013, SEPAR, que reúne a más de 4.000 profesionales de la salud respiratoria, se ha posicionado en contra de estos dispositivos, ya que "contienen sustancias tóxicas y nocivas para la salud y no deben ser utilizados", ha precisado Jiménez-Ruiz.

"Los cigarrillos electrónicos no son inocuos. También van provistos de nicotina y otros compuestos que se inhalan al vapear y que pueden dañar la salud. Sabemos que estas sustancias tóxicas pueden causar cáncer, bronquitis crónica e infecciones respiratorias", ha explicado el neumólogo y coordinador del Área de Tabaquismo de SEPAR, Jaime Signes-Costa.

A su juicio, la aparición de más de 200 casos en Estados Unidos de esta enfermedad desconocida posiblemente vinculada al cirgarrillo electrónico y el vapeo "llama la atención". "Aunque no podemos atribuir todavía su causa con certeza, parece confirma la peligrosidad de estos aparatos", ha asegurado el experto.

El presidente de SEPAR ha reiterado que "la evidencia científica existente" respecto a los cigarrillos electrónicos hasta el momento "no permite conocer cuáles serán sus efectos a medio o largo plazo". "No podemos descartar que nuevos procesos patológicos como el que actualmente están sufriendo algunos vapeadores en Estados Unidos puedan aparecer", ha alertado.

En esta línea, SEPAR ha solicitado "en diversas ocasiones" al Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social que "se tomen medidas" para "limitar y controlar" la publicidad de todos estos dispositivos electrónicos como sustitutivos del tabaco.

FUENTE: medicosypacientes.com