El Dr. Juan José Rodríguez Sendín presentó la actualización del Código de Deontología Médica (CDM) a la Asamblea de Representantes Provinciales de la Sección de Médicos de Atención Primaria Rural. Una las novedades que presenta el nuevo texto, y que afecta directamente a los profesionales de AP Rural, es la atención a la violencia porque como expuso el presidente de la Comisión Central de Deontología de la Organización Médica Colegial (OMC), “los profesionales no nos podemos poner de perfil ante ningún tipo de maltrato, especialmente a mujeres, ancianos y niños”

El Dr. Rodríguez Sendín comentó que los cambios que se han producido tanto en la sociedad como en la profesión médica desde 2011, año en el que se aprobó el Código actual, exigían una puesta al día y explicó que desde 1978, fecha del primer Código de Deontología Médica, “todo ha cambiado mucho, incluso los propios profesionales, que ahora contamos con medios para hacer la mejor Medicina posible” e hizo hincapié en que el incumplimietno de este documento “puede conllevar, además de afectar a la reputación profesional, sanción por motivos deontológicos".

El Código Deontológico de 2011 consta de 21 capítulos compuestos por 66 artículos, 228 puntos, más disposiciones adicionales y finales y la actualización está formada por 28 capítulos, 120 artículos, 379 puntos, disposiciones adiciones, finales, índice de términos y glosario. La nueva versión incluye siete capítulos nuevos dedicados a la historia clínica y la documentación, la seguridad del paciente, los deberes de los directivos colegiales, la atención a la violencia, la responsabilidad, las tecnologías de la información y la comunicación y la inteligencia artificial y bases de datos sanitarios.


Historia clínica y la documentación

El Dr. Rodríguez Sendín señaló que acceder a una historia clínica sin justificación “es un delito”, por eso, este capítulo además de recoger que los actos médicos deben quedar registrados en la correspondiente historia clínica y que el médico tiene el derecho y obligación de redactarla, incide en que el facultativo tiene la obligación de proteger los datos contenidos en las historias clínicas y solo debe permitir su acceso en casos justificados. 

Seguridad del paciente

El presidente de la CCD expresó que “la continuidad a la hora de atender a los pacientes es clave para su seguridad” y reconoció que “conocer al paciente, aumenta la confianza y desciende la incertidumbre, porque de lo contrario crece la medicamentalización por falta de tiempo”. 

Este apartado especifica que el profesional debe dar prioridad a la seguridad del paciente durante todos sus actos asistenciales, docentes o de investigación. Y también implica que en la información relativa a las intervenciones sanitarias el médico debe incluir la información sobre riesgos derivados de la propia enfermedad.

Deberes de los directivos colegiales

El Dr. Rodríguez Sendín comentó que “no se pueden permitir insultos entre compañeros, como ya ha sucedido otras veces” en procesos electorales de colegios. Este capítulo señala que los directivos colegiales y los que aspiran a serlo están obligados a cumplir con ejemplaridad las normas estatuarias y deontológicas, que son comunes a todos los colegiados, pero que adquieren especial relevancia en función de sus responsabilidades y expectativas.

Atención a la violencia

El presidente de la CCD incidió en que “los profesionales no nos podemos poner de perfil ante ningún tipo de maltrato, especialmente a mujeres, ancianos y niños y debemos cumplir con nuestro deber”.  Este capítulo recoge que el médico tiene el deber de combatir la violencia en su práctica diaria y de colaborar activamente para hacer posible su erradicación. En casos de mujeres, ancianos, menores o personas con discapacidad debe conocer, prevenir, diagnosticar y tratar. Nunca puede silenciar estas conductas y tiene el deber de denunciarlas.

De la responsabilidad

Este capítulo recuerda que la relación médico-paciente se fundamenta en la lealtad, la veracidad y la honestidad y que el profesional debe asumir las consecuencias negativas de sus actuaciones y de sus errores en el curso de su ejercicio profesional. “Conviene precisar responsabilidades concretas de las que en ocasiones se tiene desconocimiento”, aclaró.

Las tecnologías de la información y la comunicación

El médico debe reconocer el impacto transformador que en la atención y cuidado de la salud tienen la inteligencia artificial, la robótica, así como las tecnologías sanitarias y aplicaciones de salud disponibles. Es obligatorio el aprendizaje y la mejora continua de conocimientos y habilidades que permitan utilizar cualquier tecnología con validez demostrada para el beneficio de los pacientes. El Dr. Rodríguez Sendín destacó la importancia de evitar transmitir algún tipo de información relacionada con los pacientes con “herramientas vulnerables” como Whatsapp.

Inteligencia artificial y bases de datos sanitarios

El desarrollo de la inteligencia artificial y de la robótica influyen en la actividad médica y sanitaria. El médico debe conocer su significado y trascendencia, así como adquirir conocimientos y habilidades en esos temas, sobre todo en lo que se refiere a los beneficios y riesgos que conllevan para los pacientes.

Capítulos modificados

Además, algunos capítulos presentan modificaciones en su enunciado como el que aborda las relaciones del médico con sus pacientes, que incorpora la información y el consentimiento. El Dr. Rodríguez Sendín detalló que “no tener en cuenta la voluntad del paciente puede tener consecuencias penales”. 

Otros capítulos modificados es el relativo a los deberes del médico con la corporación colegial, la sexualidad y reproducción humana, la tortura, vejaciones y limitaciones en la libertad de las personas, y docencia y formación.

El Dr. Rodríguez Sendín aseguró que la maternidad subrogada atenta contra la dignidad de la mujer y del menor y que “de situaciones excepcionales no conviene realizar una regulación masiva”, en referencia a la eutanasia.

Las aportaciones de los médicos de cada colegio se presentarán a las Juntas Directivas que, con las alegaciones que realicen las respectivas Comisiones Deontológicas, decidirán las propuestas finales que elevaran al Consejo General. La Comisión Central de Deontología con las propuestas recibidas redactará un nuevo borrador que volverá de nuevo a la Junta Directiva de los Colegios antes de someterlo a la Asamblea General para su aprobación y debate de los puntos donde exista discordancias hasta la aprobación final del texto definitivo.

El documento se encuentra en fase de consultas hasta el próximo 15 de febrero. Durante este periodo los Colegios de Médicos podrán presentar sus aportaciones a la actualización del Código de Deontología Médica. La corporación hizo llegar a los Colegios de Médicos el borrador de la actualización del Código de Deontología Médica en los últimos meses de 2018 y abrió así un proceso democrático y transparente para que cada Colegio pueda trasladar a sus colegiados el borrador de los cambios propuestos al Código Deontológico de 2011, con el fin de que los colegiados presenten sus aportaciones a la Junta Directiva de cada Colegio, que a su vez elevará sus propuestas al Consejo General para estudio, análisis y aprobación, en su caso.

FUENTE: medicosypacientes.com