El 28% de las víctimas de trata identificadas en el mundo son niños y niñas, según informaron Unicef y el Grupo de Coordinación Interagencial contra la Trata (ICAT) con motivo de la celebración este lunes del Día Mundial contra la Trata de Personas. La Organización Médica Colegial (OMC) se suma a este día mostrando su compromiso y colaboración en esta causa a través del programa DNA-Prokids de la Universidad de Granada, un proyecto, pionero en el mundo, para llevar a cabo la batalla científica contra el tráfico de seres humanos, especialmente de niños, mediante la identificación genética de las víctimas y sus familiares. Desde su puesta en marcha, hace 10 años, se han evitado cerca de 300 adopciones ilegales y se han realizado más de 828 identificaciones positivas

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) estima que 2,5 millones de personas son víctimas de trata, tanto hombres como mujeres y niños que caen en manos de traficantes de su propio país y del extranjero.
 
El tráfico mundial de niños para adopción ilegal, prostitución y explotación sexual, trabajos forzados y semi-esclavitud, el uso de niños-soldado, delincuencia y circunstancias similares es un grave problema de preocupación internacional que se ha convertido en una pandemia.


Más de 160 países están afectados por este problema. La mayoría de las víctimas tienen entre 18 y 24 años y el 95% de ellas han sufrido violencia física o sexual. En cuanto a los niños, cada año, se estima en 1,2 millones de niños las víctimas de tráfico de personas. 
 
Según indicaron  Unicef y ICAT, este porcentaje se incrementa de forma alarmante en regiones como África Subsahariana y Centroamérica, donde se alcanza el 64%, y el Caribe, con el 62% de niños de las víctimas de trata identificadas.
 
Unicef e ICAT creen que el número de niños que caen víctimas de las redes de trata es mayor de lo que sugieren los datos que se manejan.
 
La realidad es que los niños raramente son identificados como víctimas de trata. Además, aseguraron que muy pocos denuncian, por miedo a los tratantes, por falta de ormación sobre sus opciones, desconfianza en las autoridades, miedo al estigma o la posibilidad de que les devuelvan sin ninguna garantía y con unos recursos materiales muy limitados.
 
Los niños refugiados, migrantes y desplazados son especialmente vulnerables a la trata. La directora ejecutiva de Unicef, Henrietta Fore, aseguró que “la trata de personas es una amenaza muy real para millones de niños en todo el mundo, especialmente aquellos que se han visto obligados a dejar sus hogares y sus comunidades sin una protección adecuada. Estos niños necesitan urgentemente que los gobiernos den un paso adelante y tomen medidas para mantenerlos seguros”.
 
Ante esta situación, Unicef e ICAT siguen haciendo un llamamiento para que se implementen las políticas gubernamentales y soluciones transfronterizas que mantengan a los niños seguros. Entre ellas, la ampliación de rutas legales seguras para que los menores migren con sus familias y el fortalecimiento de sistemas de protección social e infantil.
 
A estas medidas se añade la mejora de la colaboración transfronteriza y el intercambio de información entre los controles fronterizos y evitar medidas que puedan empujar a los niños a escoger rutas más arriesgadas y a migrar solos para evitar que las fuerzas policiales les detecte.
 
DNA-Prokids,  batalla científica contra el tráfico de seres humanos
 
Hace más de una década el Dr. José Antonio Lorente, catedrático de Medicina Legal experto colaborador del FBI de EEUU, de la Guardia Civil y la Policía españolas en temas de ADN, puso en marcha el programa de investigación genética DNA-Prokids, desarrollado en el Laboratorio de Identificación Genética del Departamento de Medicina Legal de la Universidad de Granada.
 
Una década desde su puesta en marcha, este proyecto español de innovación genética, es una realidad en 16 países, entre ellos, Brasil donde hay 300.000 niños desaparecidos o en India, donde cada año desaparecen 130.000 niños que caen en manos de mafias de tráfico de personas para explotación laboral, prostitución, uso de niños soldados, adopciones ilegales o tráfico de órganos.
 
Este grave problema que afecta a todo el mundo, también está presente en Europa, donde se ha agudizado con la llegada de refugiados y la desaparición de 10.000 niños a los que se ha perdido la pista al llegar al continente, según estimaciones de la Oficina Europea de Policía (Europol).
 
DNA-Prokids realiza la identidad genética de los niños en adopción para confrontarlos con el de sus padres y también la identidad genética de personas que denuncian la desaparición de sus familiares. Todo ello lo hace a través de un sencillo kit incluido en un sobre donde se recogen muestras genéticas –un mechón de pelo o unas gotas saliva- que bastan para comparar el código genético de los niños perdidos y compararlo con sus familiares en el Laboratorio de Identificación Genética de la Universidad de Granada.
 
Desde su implantación, se han realizado más de 10.300 muestras genéticas; se han conseguido más de 828 identificaciones positivas, es decir, se ha logrado reunir a estos niños con sus padres mediante pruebas de ADN. Y se han evitado más de 255 adopciones ilegales.
 
Donde mayores problemas de tráfico de personas se detectan en Centroamérica es en Guatemala, Honduras, Bolivia, México, Brasil y Perú. Este mismo mes, el Dr. Lorente mantuvo una reunión con la primera dama de Honduras, Ana Rosalinda Garcia, interesada por este programa DNA-Prokids ante la creciente trata y tráfico de personas, especialmente niños y niñas que viven atrapados en redes proxenetas, a pesar de las duras leyes implantadas por el Gobierno hondureño contra el tráfico de personas.
 
En el continente asiático, son India, Nepal, Birmania y Bangladesh los países más afectados por esta trata de personas, secuestradas en manos de mafias, que las someten a todo tipo de abusos y flagrantes violaciones de los derechos humanos.
 
En Europa, también existe un grave problema de tráfico de personasque llegan a  Grecia de Siria, Irak y Afganistán, y de las que llegan a Italia de Sudán, Eritrea, Somalia, Senegal, Gambia, Guinea, Ghana, Costa de Marfil, Nigeria, Malí y Camerún. España no es ajena a este problema con personas que llegan de Marruecos, Argelia, Sierra Leona, Ghana y Camerún y entran por Ceuta y Melilla, ciudad esta última que asumió el programa DNA-Prokids para identificar a menores y lactantes inmigrantes que llegan a la ciudad, en ocasiones, a través de mafias de tráfico de menores.
 
La ausencia de identificación adecuada y la dificultad o imposibilidad en ocasiones para conocer el origen de los menores facilita el tráfico de estas personas. Por lo que es preciso el uso de toda la tecnología disponible, como esta de DNA-Prokids, y sentar las bases de una estrategia para hacer frente a este problema que incluya la identificación genética obligatoria, regulada por ley, para adopciones, viajes sin familia, exilios, migraciones masivas y situaciones similares de riesgo. Así como facilitar la cooperación internacional.
 
La OMC, defensora de este programa humanitario 
 
La OMC se adhirió hace tiempo a este programa humanitario, consciente del importante papel que desempeñan los médicos en el tema de las adopciones a la hora de emitir certificados e informes, tanto de idoneidad para los padres como de control del menor.
 
Además, lo ha promovido y defendido en el Foro Iberoamericano de Entidades Médicas, en el que ha propuesto la creación de un Observatorio Internacional sobre tráfico de menores y adopciones ilegales para hacer un estudio y seguimiento de este problema que requiere la cooperación internacional.
 
También lo ha defendido en la Asociación Médica Mundial donde este mismo año consiguió que se realice una Declaración, pendiente de aprobación en su próxima Asamblea General, en la que se resalta la misión del médico en la prevención del tráfico y la adopción ilegal de menores, así como el compromiso de denunciar situaciones ilegales o irregulares, en especial, en muchos países en desarrollo, en los que hay un negocio organizado alrededor del tráfico de seres humanos.
 
En septiembre lo llevará a la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinomericana (Eurolat) que se celebrará en Montevideo (Uruguay) de la mano del europarlamentario español y co-presidente de esta Asamblea, Ramón Jáuregui.
 
Bolivia, Brasil, Ecuador, El Salvador, España, Filipinas, Guatemala, Honduras, Indonesia, Malasia, México, Nepal, Paraguay, Perú, Sri Lanka, Tailandia.

FUENTE: medicosypacientes.com