El comisario Javier Galván, interlocutor policial nacional sanitario de la Policía Nacional, detalla las claves de la puesta en marcha de esta figura en una entrevista realizada con motivo del Día contra las Agresiones a Sanitarios que se conmemora este 15 de marzo. El objetivo de esta medida es ofrecer una “respuesta coordinada, planificada y homogénea ante las agresiones”. Galván estará presente este jueves en la presentación de los datos de las agresiones a médicos en 2017 que realiza el Observatorio de la Organización Médica Colegial

¿Qué supone la puesta en marcha del interlocutor policial sanitario?

Esta figura facilita que la sanidad y la seguridad se conozcan, lo que permite que se pueda trabajar este problema que sufren los profesionales del sector sanitario.

¿Cómo va a funcionar el interlocutor en el día a día?

Se comporta a través de actividad planificada desde la figura del interlocutor policial nacional sanitario, que yo represento. Los 55 interlocutores provinciales tendrán relaciones institucionales, conferencias y jornadas. Además, reciben formación para poder tener un discurso único desde Policía Nacional para prevenir y evitar este tipo de delitos.


¿De qué manera beneficia al profesional?

Existe una conexión semanal con los Colegios Oficiales de las provincias y con los Consejos Generales y el Observatorio de Agresiones de la Organización Médica Colegial. Esto supone una coordinación y toma de decisiones prácticas y de planificación operativas y estratégicas. 

La presencia del interlocutor, ¿mejorará la coordinación entre la Administración sanitaria y los Colegios de Médicos en este asunto?

Sí. De hecho, hemos sido promotores de que los diferentes colegios de las profesiones sanitarias caminen juntos con nosotros.

¿Cómo se va a definir el nivel de riesgo de los centros hospitalarios?

Hemos hecho un censo sanitario en el ámbito de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, según la competencia territorial, en el que se ha catalogado los centros sanitarios en función de su nivel de riesgo, como marcaba la Instrucción 3/2017.

Como pretendemos que esta iniciativa sea eficaz, hemos solicitado que se le presten además otro tipo de indicadores, como el nivel de delincuencia en la zona donde está ubicado o el tipo de delitos que se han cometido. Estamos trabajando en ello.

Hay que implantar la seguridad privada en el sistema sanitario español, además de la seguridad pública. En la actualidad todo el tejido empresarial español y la Administración cuentan con el recurso de la seguridad privada y para ello es preciso elaborar una planificación estratégica para tratar de conseguir que las conductas delictivas o incívicas sean prácticamente nulas.

Por eso, entendemos que es necesaria la creación del departamento de Seguridad con un director a su cargo, que sea el interlocutor con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Respecto a los interlocutores, ¿cómo se van a coordinar la Policía Nacional con la Guardia Civil?

Existe una perfecta coordinación entre ambos cuerpos. La Policía Nacional se encargará de lo que suceda en los hospitales y centros sanitarios de las ciudades y Guardia Civil hará lo propio en el ámbito rural.

¿Cómo valora la labor que desde su creación desempeña el Observatorio de Agresiones de la OMC?

Han conseguido importantes avances. Uno de los más relevantes es introducción del artículo 550 en el Código Penal sobre la catalogación como autoridad del médico en el caso de que sufran agresiones en el ámbito público, algo que debería extenderse al sector privado.

¿Cuál es la mejor manera de prevenir las agresiones?

Hay que concienciar a la sociedad del importante papel que desarrollan los profesionales sanitarios y desde el ámbito de la seguridad vamos a apoyar y afianzar que no se produzcan episodios de agresiones.

FUENTE: medicosypacientes.com