La Atención Primaria no tiene una financiación suficiente y lo más grave es que con la crisis ha sufrido más intensamente los recortes, de tal modo que mientras el retroceso en inversión sanitaria pública ha sido entre 2010 y 2014 del 10,7%, en el caso del primer nivel asistencial el recorte ha sido muy superior, en concreto, del 14,7%. Sin embargo, "sin una financiación suficiente adecuada, y equitativa de la A.P. no se podrá hacer frente a los retos del SNS”. Así lo expone el Dr. Vicente Matas, vocal nacional de A.P. Urbana, en el primer post del nuevo Blog AP25 puesto en marcha por la OMC, del que habla en esta entrevista.
-Su trabajo en el Documento “La Atención Primaria de Salud en España en 2025” se centra en la suficiencia financiera de la A.P. ¿a qué conclusión llega?
-La conclusión es muy simple, AP no tiene una financiación suficiente y lo más grave es que con la crisis ha sufrido más intensamente los recortes, de tal modo mientras que el retroceso en inversión sanitaria pública ha sido entre 2010 y 2014 del 10,7% en el caso de AP el recorte ha sido muy superior, en concreto del 14,7% (1.551 millones de euros). Si nos fijamos en lo que se invierte en AP por habitante protegido lo veremos de una forma más clara, en 2014 fueron 172 euros mientras que en farmacia fueron se invirtieron 226. Para los gestores ha sido muy fácil recortar en AP.
-¿Por qué considera se invierte tan poco en Atención Primaria? ¿Cuál sería el presupuesto idóneo?
-Se invierte muy poco por desconocimiento de las Administraciones y los responsables políticos, que conocen mejor el hospital que lo tienen más cercano y les resulta más atractivo y rentable invertir en tecnología para salir en los medios de comunicación.
Teniendo en cuanta la ingente labor que se realiza en AP (más de 373 millones de consultas en el centro, más de 14 millones de visitas a domicilio y 28 millones de urgencias) lo ideal sería que se invirtiera en AP más del 20% del presupuesto sanitario público.
-¿Considera que la inversión en A.P. contribuiría a la sostenibilidad del SNS?
-Es más considero que si AP no tiene una inversión suficiente el SNS no será sostenible, sobre todo con el envejecimiento de la población y el incremento de patologías crónicas.
Invertir en AP es invertir de forma eficiente, si no se hace así, AP no podrá resolver el 90% de las demandas que le llegan de los pacientes y tanto las urgencias de los hospitales como los propios hospitales se verán desbordados y el SNS puede colapsar. AP deber seguir siendo resolutiva y en demasiados centros de salud hay sobrecarga de trabajo, consultas masificadas (más de 40 o incluso 50 pacientes diarios) y demoras importantes para conseguir cita con el médico de cabecera. Las demoras en AP provocan saturación en urgencias tanto de AP como de Hospital y por tanto mayor coste de la asistencia.
-¿Pueden afectar los recortes en el primer nivel asistencial a la salud de la población?
-Sin duda pueden afectar, a pesar del tremendo esfuerzo que están haciendo los médicos de AP y el resto de profesionales, en muchas ocasiones las consultas saturadas y las demoras en conseguir cita, de más de 3 o 4 días en demasiadas ocasiones, afectan a la calidad asistencial. Los médicos necesitan tiempo para una atención de calidad y en demasiados centros no disponen del tiempo necesario, a esto se suma la precariedad en el empleo, hay demasiada rotación de médicos precarios que no llegan a conocer a los pacientes y es fundamental en primaria que el médico conozca a sus pacientes y estos a su médico, gran parte de la eficiencia se debe precisamente al conocimiento de años del médico de cabecera a sus pacientes, es fundamental.
-¿Son llamativas las diferencias existentes entre las CC.AA., al respecto?
-Más que llamativas son escandalosas, como podemos comprobar en el informe la inversión en AP varía desde unos mínimos de 140 euros hasta los 264 euros por habitante protegido (más del 88%), con datos correspondientes al año 2014 y según datos del Ministerio. Aunque la dispersión y edad de la población influyen en las necesidades de financiación, estos dos factores fundamentales no justifican en modo alguno estás grandes diferencias, que sin duda están afectando a la equidad de la asistencia sanitaria que reciben los españoles.
Por esto necesitamos, de forma urgente, unos presupuestos sanitarios públicos finalistas y equitativos que tengan en cuenta fundamentalmente edad y dispersión. Necesitamos un SNS cohesionado.
-¿Qué perspectivas vislumbra para los próximos años?
-Con la salida de la crisis es necesario recuperar lo perdido por el SNS y muy especialmente por AP que venía perdiendo participación en el presupuesto desde los años 80 y se ha agravado con la crisis. Desde el Foro de Médicos de AP se viene exigiendo desde hace años un incremento presupuestario y este año una CCAA ha comprometido un incremento presupuestario importante para AP, por lo que se le ha hecho un reconocimiento en el día de AP. Sería importante que otras CCAA tomarán ejemplo y pasaran de las buenas palabras a los hechos.
Sin una financiación adecuada, suficiente y equitativa de Atención Primaria, no se podrá hacer frente a los grandes retos del SNS con eficiencia y calidad. En el informe proponemos un avance del 0,1% sobre el PIB en el presupuesto sanitario público entre los años 2017 y 2025 y dentro de este un avance del 0,3% anual en la participación de Atención Primaria, hasta llegar en una primera etapa hasta el 17,3% del presupuesto sanitario público del año 2025.
Acceder al Blog AP25 y opinar sobre el tema analizado por el Dr. Vicente Matas.
Fuente: medicosypacientes.com