Con motivo del Día Europeo Contra las Agresiones a Médicos y Profesionales Sanitarios, que se celebra el 12 de marzo, Médicos y Pacientes entrevista al Dr. Luis Alfonso Pérez, secretario del Colegio de Médicos de Zamora y miembro del Observatorio de Agresiones del CGCOM. En esta entrevista señala que “hemos pasado de los aplausos a la impaciencia y a la agresividad para con el personal sanitario”.

Mañana, jueves, 10 de marzo a las 11:00h el Observatorio Nacional contra las Agresiones en el Ámbito Sanitario del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) presentará, en rueda de prensa, como cada año el informe de los datos de las agresiones que han sufrido los médicos y médicas en el ejercicio de su profesión a lo largo de 2021.

De los aplausos, a la sobrecarga asistencial y al aumento de la crispación social ¿Cómo ha afectado la pandemia a las agresiones a los sanitarios?

La presión que ejerce la pandemia tanto en los centros de atención primaria como en los hospitales es una de las principales causas de esta lacra, si bien, no es la única causa. También el deterioro por déficit de recursos ha provocado crispación entre los ciudadanos. Hemos pasado de los aplausos a la impaciencia y a la agresividad para con el personal sanitario.

¿Qué herramientas precisan los médicos para hacer frente estas situaciones?


Luchar contra las agresiones a personal sanitario con iniciativas formativas en materia de técnicas de defensa verbal y evitación ante conductas violentas,  haciendo hincapié en cómo actuar ante estas situaciones, antes, durante y después de la agresión. Por la prevención. Yo siempre contesto lo mismo, la mejor prevención de Agresiones es “poder trabajar en un entorno seguro, sintiéndonos protegidos por la Administración y la Justicia”.

¿Han aumentado las agresiones telemáticas y por redes sociales?

Ante el descenso de la actividad sanitaria presencial por el COVID 19 se multiplican los casos en el entorno digital. Las medidas de seguridad para frenar la transmisión del coronavirus, ha propiciado el uso de la telemedicina, para canalizar las demandas de los pacientes garantizando su seguridad en espacios de riesgo.

¿La telemedicina ha afectado la relación médico-paciente?

La relación Médico Paciente es el eje fundamental y la base sobre la que se ha de fomentar la asistencia sanitaria y en este caso las tecnologías han de estar encaminadas a la mejora de la humanización de la medicina. No podemos negar el avance de la tecnología cuando ella nos aporta beneficios y mejoras

Un año después de la puesta en marcha del Curso de Agresiones de la FFOMC y con más de 1600 alumnos. ¿Qué valoración hace de esta formación?

Pienso que el balance es muy positivo. Aunque el Observatorio de Agresiones a Médicos de la OMC es ambicioso y pretende que llegue a más personal sanitario. Pienso que se ha dotado de habilidades básicas al personal sanitario para proporcionar unos instrumentos esenciales que les permitan entender y responder a los problemas que se suscitan desde el ámbito de las agresiones

¿Cómo repercutirá este curso en la tendencia de agresiones?

Deseamos y esperamos que al menos sea el principio del descenso de Agresiones a Personal Sanitario.

¿Cómo ha evolucionado el papel del Observatorio contra las agresiones?

La consideración de delito de atentado contra la autoridad para las agresiones a sanitarios, tal y como ha quedado reflejado en la reforma del Código Penal, es el logro más destacado de muchos años de lucha de la Organización Médica Colegial contra las agresiones a Personal Sanitario. Y la figura del Interlocutor Policial Sanitario que nace a propuesta del Observatorio de Agresiones a raíz de la reunión con el Ministro de Interior, que mantuvimos en marzo de 2017, con motivo del Día Nacional contra las Agresiones, que supone un gran avance y sirve para articular mecanismos e instrumentos de colaboración y coordinación a nivel nacional entre la Policía y la Guardia Civil y las autoridades sanitarias competentes.

¿Cómo es la colaboración con el interlocutor policial?

Tanto a nivel Nacional como a nivel local, la colaboración es fabulosa. Esta figura facilita que la sanidad y la seguridad se conozcan, lo que permite que se pueda trabajar en el tema de Agresiones. El objetivo es tejer una red de comunicación eficaz para identificar y evaluar todas las agresiones que se notifiquen. Para esta labor es fundamental la necesidad de que todos los profesionales sanitarios notifiquen cualquier tipo de agresión sufrida. Sólo de esta manera, el interlocutor y su equipo podrán estudiar de forma individual a los agresores, analizar su perfil, si tienen antecedentes, si son reincidentes o si son casos puntuales.

Un médico o una médica que sufre una agresión. ¿Qué tiene que hacer?

Lo primero que hay que hacer es pedirasistencia médica si existe agresión física y que se realice un informede lesiones detallado, así como documentos y testimonios de testigos presenciales.

El siguiente paso es denunciar, el mejor lugar para denunciar es el juzgado, allí será donde se pueda entregar toda la documentación y pruebas de la agresión que faciliten la labor del juez. Además de la denuncia, el agredido deberá reportar los hechos al Colegio de Médicos de su provincia, ya que le va a asesorar y acompañar en el proceso. Deberá además comunicarlo a su superior para tramitar la baja, si procede o para que, si la empresa cuenta con servicios de apoyo, se lo presten.

¿Cómo afecta este hecho a su labor profesional?

Las consecuencias que se dan con mayor frecuencia en el Médico agredido son,  sentimientos de frustración, ira, burnout, depresión, estrés postraumático y abandonar el lugar de trabajo.

El año pasado se instauro el 12 de marzo el Día Europeo Contra las Agresiones a la que se sumaron las instituciones europeas. ¿Qué ha supuesto este hecho?

Significa que debe ser tomado como una oportunidad para dar visibilidad a este problema, tanto a las autoridades, como a los ciudadanos en general y por supuesto a los pacientes. El objetivo es sensibilizar sobre el grave problema que significan las agresiones a sanitarios porque afecta a una actividad fundamental para nuestra sociedad que debe desarrollarse con el mayor respeto y seguridad hacia sus profesionales.

¿Qué más se puede hacer desde el CGCOM para acabar con esta lacra?

Las acciones del Observatorio están encaminadas, en primer lugar, a evitar en la medida de lo posible estas agresiones que, además de repercutir gravemente en la salud y en la calidad de vida del profesional agredido, afecta de forma sustancial a la actividad sanitaria, uno de los pilares básicos de nuestra sociedad del bienestar.

Lo conseguido hasta ahora desde el Observatorio es muy importante. Por supuesto, aún queda mucho por hacer. Seguiremos trabajando en el registro nacional de agresiones, que ya es referencia a nivel nacional e internacional. Queremos favorecer los convenios con Fiscalías y Administraciones autonómicas en diversas comunidades autónomas que servirían para avanzar en procedimientos judiciales rápidos, expeditivos y ejemplarizantes. El trabajo continuará con la difusión de las agresiones en medios de comunicación y, por supuesto, acercar el problema a las administraciones, para que podamos conseguir el objetivo final: tolerancia cero.

FUENTE: medicosypacientes.com