La Guardia Civil ha detenido recientemente en Baena (Córdoba) a un varón de 24 años de edad con antecedentes policiales como presunto autor de un delito de atentado a la autoridad, amenazas a efectivos de la Policía Local y resistencia grave a los agentes de la autoridad, tras supuestamente agredir a un médico del centro de salud baenense. La autoridad judicial ha acordado su ingreso en prisión. La Dirección del Área de Gestión Sanitaria Sur de Córdoba y la Delegación Territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía condenaron "el lamentable e injustificable episodio de violencia física" contra el profesional sanitario

El suceso tuvo lugar el pasado 2 de septiembre en las instalaciones del Centro de Salud de Baena, cuando un vecino del municipio se había personado en el Servicio de Urgencias del Centro de Salud para recibir asistencia médica por unas heridas que presentaba. Mientras recibía dicha asistencia presuntamente insultó al personal sanitario, llegando incluso a agredir al médico de guardia que le practicaba la cura.  El profesional precisó atención sanitaria por las lesiones sufridas y presentó denuncia.


Inmediatamente, varias patrullas de la Guardia Civil y de la Policía Local de Baena se trasladaron al lugar indicado, donde tras identificar al presunto agresor, que se encontraba en "un evidente estado de nerviosismo", comprobaron que había provocado varios daños en las instalaciones.


Asimismo, en el momento de la intervención, el presunto agresor supuestamente insultó y amenazó a los agentes de la Policía Local, momento en el que los guardias civiles lo detuvieron. El detenido y las diligencias instruidas han sido puestas a disposición de la autoridad judicial, que ha acordado el ingreso en prisión del detenido.
 
Ante estos "lamentables hechos", se activó de forma inmediata el Plan de Prevención de las Agresiones del Servicio Andaluz de Salud (SAS), que incluye asistencia jurídica y apoyo psicológico a los profesionales afectados.
 
El Plan de Prevención tiene como objetivo prioritario reducir las posibles agresiones, incorporando un protocolo de actuación con asistencia jurídica y apoyo psicológico, herramientas como cursos de formación en manejo de situaciones conflictivas, adaptaciones de locales y ubicación de profesionales y análisis de las incidencias que se producen, entre otros.
 
Según la delegada territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta en Córdoba, María Ángeles Luna, "cualquier tipo de violencia es inaceptable". Por ello, expresó su solidaridad y apoyo al profesional que sufrió, en el ejercicio de su labor, este episodio de agresión física, así como al resto de profesionales que en ese momento se encontraban trabajando y que igualmente sufrieron amenazas e insultos.

FUENTE: medicosypacientes.com